Son las parcelas más bajas de la explotación, a unos 550 metros de altitud. Sobre suelos rojos, francoarenosos y pobres cultivamos la variedad tempranillo con pequeños majuelos de moravia agria y cabernet sauvignon.
Las uvas de estas parcelas son las primeras en vendimiarse, a primeros de septiembre. Y son la base de uno de nuestros vinos más conocidos: Fianza.