El Clima

Nuestro clima es mediterráneo continentalizado, con veranos calurosos e inviernos fríos.

Las precipitaciones oscilan entre los 350 mm los años más secos y los más de 550 mm los más lluviosos. Son muy irregulares, y los máximos suelen ser equinocciales, en primavera y otoño, con permiso de los inviernos lluviosos. Las nevadas en invierno no son raras, tampoco las nieblas.

Los meses de verano suelen ser muy secos y las precipitaciones que se producen en este periodo presentan, con frecuencia, forma de violentas tormentas apareciendo a veces el temido granizo.

Lo más característico de las temperaturas es la fuerte oscilación térmica, tanto anual como diaria, debida al aislamiento de la influencia del mar. Los veranos son calurosos, con temperaturas medias por encima de los 20 º y los inviernos fríos con heladas frecuentes.

Las heladas de primavera no constituyen un problema serio para la viña, que empieza a mover cuando los fríos ya han pasado.

Cuando las noches empiezan a refrescar, los días previos a la vendimia, las condiciones para la síntesis fenólica en el viñedo son excepcionales.

Luz de tormenta Arco Iris sobre Férez Cumulonimbos sobre la bodega Atardecer en junio Cirrocúmulos en el cielo de la bodega El invierno con la bodega a lo lejos Nevazo sobre las cepas Cortina de lluvia en Semana Santa Podando con niebla Tormenta en ciernes Espectacular cielo La bodega a lo lejos